Hola todos y a todas, me apetece mucho contaros y dejar plasmado este instante tan bonito que he tenido la suerte de experimentar.
Hoy es el tercer dia de reiki que le hemos dado a un chaval mi marido Victor y yo, y ha sido intenso muy intenso sin duda.
He sentido como hoy estaba mas activo, emocionado y hasta alguna lagrima ha brotado de él, algo que no ocurre en absoluto en su vida ni por asomo.
Durante tres dias me he centrado mucho en su corazon, en que pueda experimentar sentir emociones por el mismo y por los demas, en que la energia le llegue a donde mas la necesite y ... hoy he sentido una gran alegria, gozo y dicha como cuenta la parabola del hijo prodigo, de repente la palabra "bienvenido" resonaba en mis oidos una y otra vez y he sentido tal alegria y felicidad que una lagrima tras otra brotaba sin cesar pero con mucha fluidez y paz.
Era algo un tanto extraño pero los que damos reiki creo que lo entendemos porque de una u otra forma lo hemos experimentado, es una maravilla poder servir de canal, tener esta gran bendicion de poder ayudar en esta vida terrenal a nuestros hermanos y a nosotros mismos.
y sabéis que? él preguntó si le habiamos pasado el péndul o algo así porque sentía como una presencia muy cercana que no llegaba a tocarle pero la sentía muy próxima, así como el péndulo que algunas ya habéis experimentado cómo sabes por donde está aún sin verlo porque lo sientes mucho. Y en ese momento yo estaba sintiendo que una gran fiesta en el cielo se estaba celebrando por un nuevo ser que se rencuentra con Todo.
Un abrazo muy grande.
Hoy es el tercer dia de reiki que le hemos dado a un chaval mi marido Victor y yo, y ha sido intenso muy intenso sin duda.
He sentido como hoy estaba mas activo, emocionado y hasta alguna lagrima ha brotado de él, algo que no ocurre en absoluto en su vida ni por asomo.
Durante tres dias me he centrado mucho en su corazon, en que pueda experimentar sentir emociones por el mismo y por los demas, en que la energia le llegue a donde mas la necesite y ... hoy he sentido una gran alegria, gozo y dicha como cuenta la parabola del hijo prodigo, de repente la palabra "bienvenido" resonaba en mis oidos una y otra vez y he sentido tal alegria y felicidad que una lagrima tras otra brotaba sin cesar pero con mucha fluidez y paz.
Era algo un tanto extraño pero los que damos reiki creo que lo entendemos porque de una u otra forma lo hemos experimentado, es una maravilla poder servir de canal, tener esta gran bendicion de poder ayudar en esta vida terrenal a nuestros hermanos y a nosotros mismos.
y sabéis que? él preguntó si le habiamos pasado el péndul o algo así porque sentía como una presencia muy cercana que no llegaba a tocarle pero la sentía muy próxima, así como el péndulo que algunas ya habéis experimentado cómo sabes por donde está aún sin verlo porque lo sientes mucho. Y en ese momento yo estaba sintiendo que una gran fiesta en el cielo se estaba celebrando por un nuevo ser que se rencuentra con Todo.
Un abrazo muy grande.